En Slow Psicología, entendemos que el duelo es un viaje único y personal tras la pérdida de un ser querido. Nuestro enfoque integrativo y relacional te acompaña en cada etapa, ayudándote a procesar tus emociones y reconstruir tu vida con un plan de tratamiento personalizado que respete tu experiencia.
El duelo es una respuesta natural ante la pérdida y puede afectar tanto a nivel intrapsíquico como interpersonal. En Slow Psicología, abordamos el duelo desde un enfoque holístico, considerando las dimensiones física, cognitiva, emocional y espiritual de cada persona.
Cada persona vive su duelo de manera única. Ofrecemos un mapa personalizado que guía a cada doliente en su proceso, escuchando sus necesidades de conectar con el dolor y, al mismo tiempo, encontrar formas de desconectar para poder avanzar hacia una nueva realidad.
El duelo no solo afecta al doliente, sino también a su entorno familiar. Nuestro trabajo incluye un enfoque sistémico que considera el impacto del duelo en la pareja y los hijos, facilitando una mirada conjunta para abordar y elaborar las emociones difíciles que surgen durante este proceso.
La terapia te proporcionará un espacio seguro para explorar y procesar tus emociones relacionadas con la pérdida.
Aprenderás a reconocer y validar sentimientos como la tristeza, la culpa o la ira, lo que te permitirá avanzar en tu proceso de duelo de una manera saludable.
Recibirás un acompañamiento individualizado que se adapta a tus necesidades específicas.
Nuestro enfoque integrativo y relacional te ayudará a encontrar herramientas y estrategias que te permitan afrontar la pérdida y comenzar a reconstruir tu vida, respetando tu propio ritmo.
La terapia no solo se centra en ti como doliente, sino también en el impacto del duelo en tus relaciones.
Te ayudaremos a comunicar tus necesidades y a mejorar la comprensión mutua y acercamiento a tus seres queridos, fortaleciendo así los vínculos familiares y sociales en este momento difícil.
Nos adaptamos a tus necesidades, desde cualquier lugar en el que estés o en sesión presencial.
Con la misma profesionalidad, confidencialidad y tranquilidad.
En la primera sesión te pediremos tanto tus datos personales como información personal pasada y presente relacionada con la inquietud que traigas a consulta, de esta forma podremos hacernos una idea de cómo estás viviendo la situación por la que estás pidiéndonos ayuda. También te explicaremos qué puedes esperar del proceso terapéutico y cuáles serán los siguientes pasos. Podrás hacernos las preguntas que necesites.
Esta primera sesión tiene una duración mayor que el resto de sesiones para que podamos conocernos un poquito mejor y establecer una relación terapéutica sintónica, por eso la duración de la misma es de 90 min.
Las siguientes sesiones tendrán la duración de 60 min. de duración y suelen disponerse con una regularidad semanal o quincenal, al menos durante los primeros meses de asesoramiento.
Rotundamente, sí. Toda la información que se recopila en consulta durante el proceso completo, desde la primera toma de contacto hasta la última sesión, está sujeta a la más estricta confidencialidad.
No hay una respuesta estándar a esta pregunta. El objetivo que nos planteamos desde el principio es que puedas interiorizar y generar estrategias armónicas que te ayuden en el afrontamiento y elaboración de la situación que te preocupa tan pronto como sea posible, de tal forma que puedas ser autónoma en un periodo de tiempo aceptable. Dependerá también del trabajo personal que hagas entre sesiones y de la situación de origen de la que partamos en la primera sesión.
Si no podemos ayudarte porque el acompañamiento que necesitas excede de nuestro nivel de competencia, atendiendo a nuestro código deontológico, te derivaremos al profesional más adecuado para que te pueda ayudar.